Papel protagonista: el papel pintado vuelve a estar de moda




El estilo retro vintage nos trae de vuelta los papeles pintados para vestir las paredes. Fue un elemento decorativo económico y muy recurrente para cambiar el estilo del hogar en los 70. Ahora, reaparece mejorado desde el punto de vista práctico. Atrévete con el papel para redecorar tu casa. Todo son ventajas.



Buenas razones para pasarse al papel


  • Empapelar las paredes resulta muy efectivo: se cambia radicalmente de apariencia de una estancia de manera limpia y sencilla.
  • El papel permite, además, decorar una habitación de manera mucho más personalizada, ya que supone una alternativa bastante más sugerente que la pintura: permite conseguir más efectos con sus nuevos diseños y texturas que imitan piel, telas o madera.
  • El papel pintado se combina con la pintura y también con otros papeles para crear ambientes diferentes.
  • Se coloca fácilmente, aunque es preferible que lo realice un profesional, y tiene mucha mayor resistencia que la pintura, ya que dura largo tiempo en perfectas condiciones.
  • Las paredes siempre estarán como el primer día, porque ahora es posible mantener limpio el papel simplemente con pasar un paño húmedo.
  • Es lo mejor para tapar imperfecciones.

Con tantos diseños y opciones, ¿cómo acertar?

  • Si te has decidido a cambiar el aspecto de las paredes y te seduce la idea de empapelar, ten en cuenta tu presupuesto. Siempre será más económico pintar, pero puedes utilizar el papel sólo en una de las paredes.
  • Encuentra el estilo. Hay infinidad de diseños, colores y texturas. La elección debe hacerse en función del resto de la decoración y de la personalidad que quieras imprimir en la habitación.
  • Ten en cuenta el efecto que se puede conseguir: con tonos y estampados más oscuros, conseguirás crear un ambiente cálido y acogedor; para una zona de reducidas dimensiones, siempre papel liso, para no recargar.
  • En una zona poco iluminada, tonos lisos y claros.
  • Para empapelar baños y cocinas, elige papeles específicos, resistentes al agua y a la humedad.

Como ves el papel es la opción perfecta para darle un toque diferente a tus estancias sin hacer una gran inversión. Se adaptan a salas de estar, pasillos, dormitorios y hasta cocinas y baños. Además, ahora son lavables, resistentes al fuego y la luz y fáciles de retirar en seco.

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